La investigación en enfermería y la calificación de la atención: algunas reflexiones
DOI:
https://doi.org/10.5216/ree.v14i4.13408Resumen
Hemos experimentado en Brasil un crecimiento significativo de los grupos de investigación(1), habiéndose incrementado las investigaciones de enfermería y, en consecuencia, aumentando la divulgación en periódicos científicos, así como la calificación de los investigadores y de las publicaciones del área.
Esta mejora se ha traducido en la elevación de los índices bibliométricos(2-3), siendo válido destacar que este movimiento acompaña el incremento de la posgraduación en enfermería en el país. No obstante, debe imponerse un cuestionamiento: ¿Cuál ha sido el impacto de esta producción en la calidad de la atención prestada a los usuarios de los servicios de salud?
Intencionalmente, no ponemos el foco sólo en la atención de enfermería, por considerar que la investigación en el campo de la salud, comprometida con la defensa y la calificación de la vida, no se dirige sólo a las disciplinas profesionales que las desarrollan, sino que sobrepasan fronteras de conocimiento. En adición, tenemos como premisa a la enfermería, en cuanto se trata de una práctica social necesariamente articulada a otros trabajos y campos de conocimiento. Dicho de otra forma, no hay enfermería de calidad apartada del trabajo en salud de calidad y éticamente comprometida con la vida de las personas.
Nos parece importante reflexionar sobre el “espacio”, intersticio entre una investigación y su impacto en la atención brindada, especialmente, en el Sistema Único de Salud, pues defendemos la atención de calidad en la salud como derecho inalienable de todo ciudadano, y no como una mercadería a la cual se tiene acceso de acuerdo a la posición social y económica de cada sujeto, en el proceso de producción.
La investigación científica, así como la salud, el lenguaje y, por qué no, la enfermería, entre tantas otras, son instituciones que poseen una parte más aparente, explícita, expresa, aceptada en sus manifestaciones; y otras composiciones implícitas, tácitas que igualmente las constituyen(4). En tal perspectiva, la sociedad es un entretejido de instituciones que inciden en nuestro modo de ser, amar, estar vivos, pero que también son construidas por nosotros, por los sujetos, en su devenir histórico. Desde ese territorio conceptual es que llamamos a nuestros colegas, trabajadores de la salud, investigadores, docentes, a pensar con nosotros: ¿Qué hemos producido? ¿Para quién? ¿Para qué?
Nuestro análisis de implicación(5), visión reflexiva para el modo en que las instituciones están en nosotros, cómo ellas nos modelan y qué posición ocupamos en ellas, nos hace, desde el inicio, analizar los efectos de la invitación a elaborar esta editorial. Ciertamente, fue motivo de gran alegría, teñida por la idea del reconocimiento del trabajo, mas también efecto de lazos afectivos que no se separan de los procesos de investigación, pero que insistimos en negar y dejar fuera de la ciencia: manifestación de la institución científica en nosotros.
La investigación está ligada a la producción de conocimientos, que, por otro lado, se entrega vinculada a los programas de posgraduación en el contexto universitario, a un docente / grupo de investigación, que también es un trabajador de la enseñanza o que aglutina a otros investigadores / trabajadores. En la sociedad actual de capitalismo globalmente integrado, nos guía una premisa: existe un vínculo no disociable entre enseñanza e investigación.
Esa premisa trae consecuencias, tanto para la práctica de la enseñanza como para el desarrollo de la investigación(6). ¿Cuáles son en la actualidad, las medidas de evaluación del trabajo de un docente? En general, son mediciones que se ajusten a coeficientes tales como número de artículos publicados, número de orientaciones concluidas, número de horas de clase, etcétera.
Una de las consecuencias es la sobrecarta de profesores que ni han tenido tiempo para reflexionar. Nóvoa(6) llama nuestra atención acerca de que cuando el imperativo de la formación de profesionales reflexivos se adentra en la formación universitaria, existe una coincidente pérdida del tiempo del profesor para la reflexión(6).
¿Es posible investigar sin reflexionar? ¿Es posible acompañar el tiempo de aprendizaje de los estudiantes de graduación y posgraduación en su arduo proceso de aprender a investigar sin tiempo? ¿En qué medida los esfuerzos investigativos se han volcado al proceso de aprender y enseñar, de aprender a aprender nuevas posibilidades de intervenir en la realidad? Son preguntas que se presentan y desafían a una visión diferenciada para el producto del binomio enseñanza-investigación.
Otro aspecto de las instituciones es que existe una inmanencia entre aspectos macropolíticos y micropolíticos. Hay efectos de los sistemas de evaluación de los periódicos, de los programas de posgraduación, de las evaluaciones de las investigaciones efectuadas por colegas, así como sobre su divulgación y publicación.
Los indicadores utilizados en la métrica de la evaluación de la producción científica, traducida en factores de impacto que permiten la comparación entre periódicos científicos de variada naturaleza, las mediciones que indican el volumen de citas de cada investigador en la producción científica, los avisos de prensa que ponen en disponibilidad recursos financieros para temas y diseños específicos de investigaciones, ¿qué efectos acaban produciendo en la práctica de investigar en enfermería, en salud?
De este modo, nos parece que la intrínseca relación entre la investigación de la enfermería y de la salud para la calidad de atención prestada se va diluyendo, y resta de cierta forma la pregunta: ¿atendiendo cuál finalidad es que producimos “ciencia”? ¿Qué ciencia es esta que estamos construyendo en el campo de la salud, en el campo de la enfermería? Tal vez estemos en un proceso productivo que “esconde” los objetivos de mantenimiento de nuestro trabajo, de calificar personas, universidades y servicios, en la lógica del consumo y del individualismo. Un proceso que encuentra natural la idea de que un investigador es investigador individualmente y consigue desarrollarse por sus esfuerzos, cuando en verdad no existe producción científica que comience a partir de sí misma, pero sí existen trabajos / investigaciones / esfuerzos anteriores y concomitantes que entretejen nuestras investigaciones.
Los investigadores(7) afirman que “la producción científica inserta en el marco académico continúa alejada de los servicios, ejerciendo poca influencia en la formulación de políticas públicas de salud”. Entonces, ¿cómo volver a aproximarnos a nuestro compromiso ético-estético de producir investigaciones que tengan como fin último la calificación de la atención?
Sin respuestas listas y conscientes de la fuerza de lo instituido, nuestro desafío es el de diligenciar otros procesos, inventar nuevos dispositivos, agrietar las superficies duras de las instituciones, ranuras al principio imperceptibles, pero capaces de hacer pasar otros movimientos.
Un posible movimiento puede estar en la búsqueda de asociaciones con trabajadores y usuarios, para el pactado de investigaciones que respondan a desafíos cotidianos de los servicios de salud, intervenciones sustentadas en evidencias científicas, en conocimientos científicos producidos en una delicada e intrincada red de saberes de diferentes áreas del conocimiento(8).
Proponemos un esfuerzo colectivo de invención: construir proyectos e investigaciones que, al mismo tiempo, generen conocimientos y transformen las prácticas, y que por sobre todo, creen vida allí donde ella, en su preciosidad, reiteradamente se desvanece.
REFERENCIAS
1. Erdmann AL, Lanzoni GMM. Características dos grupos de pesquisa da enfermagem brasileira certificados pelo CNPq de 2005 a 2007. Esc. Anna Nery [Internet]. 2008 [cited 2012 dec 31];12(2):316-22. Available from: http://dx.doi.org/10.1590/S1414-81452008000200018.
2. Marziale MHP, Mendes IAC. O fator de impacto das publicações científicas. Rev Lat Am Enfermagem [Internet]. 2002 [cited 2012 dec 31];10(4):466-7. Available from: http://dx.doi.org/10.1590/S0104-11692002000400001.
3. Erdmann AL, Fernandes JD. A classificação dos periódicos científicos da área da Enfermagem. Acta paul. enferm. [Internet]. 2009 [cited 2012 dec 31];22(5):v-i. Available from: http://dx.doi.org/10.1590/S0103-21002009000500001.
4. Baremblitt G. Compêndio de Análise Institucional e outras correntes. Teoria e Prática. 5th ed. Belo Horizonte: Instituto Felix Guatarri; 2002.
5. Monceau G. Implicação, sobreimplicação e implicação profissional. Fractal, Rev. Psicol. [Internet]. 2008 [cited 2012 dec 31];20(1):19-26. Available from: http://dx.doi.org/10.1590/S1984-02922008000100007.
6. Universidade de Vigo Televisión [Internet]. Vigo: Universidade de Vigo (BR) [cited 2012 dec 31]. Mediateca. II Congreso Internacional de Docencia Universitaria (II CIDU 2011). Conferencia de António Nóvoa. Available from: http://tv.uvigo.es/video/44043.
7. Cabral IE, Tyrrel MAR. Pesquisa em enfermagem nas Américas. Rev Bras Enferm [Internet]. 2010 [cited 2012 dec 31];63(1):104-10. Available from: http://dx.doi.org/10.1590/S0034-71672010000100017.
8. Fortuna CM, Mishima SM, Matumoto S, Pereira MJB, Ogata MN. A pesquisa e a articulação ensino-serviço na consolidação do Sistema Único de Saúde. Rev Esc Enferm USP [Internet]. 2011 [cited 2012 dec 31];45(spe2):1696-700. Available from: http://dx.doi.org/10.1590/S0080-62342011000800010.